Cúmulo de anécdotas

buenos días! Vaya semana… una de las mas agitadas de este trimestre. El viernes pasado había querido publicar pero no pude porque cuando iba a revisar a ver si tenía el borrador en el celular no estaba y ¡tengo tanto que decir!

Para empezar, el lunes presente ese examen de dirección de producción de radio; como predije estuvo bastante fácil, aunque la profesora me coloco 1,7 en la nota porque no mencione que la torre Eiffel fue una de las antenas masimportantes. El martes, continuamos con la discusión del libro de Adela Cortina que si Dios quiere el examen será hoy, pero ese mismo martes por la mañana fui por primera vez a la oficina donde me corresponde hacer las pasantías: llegue a eso de las 8:00 pero el profesor no estaba, sin embargo me tope con Ian, un muchacho que esta en beca trabajo allí desde hace un año, me dijo que lo esperara hasta que llegara. Por fin arribo a eso de las 9:15 y me dijo que trabajaría en el proyecto crónicas del ayer, una historia basada en la Caracas que se nos fue de Alfredo Cortina ¡que tendrán los Cortina!! Este era un proyecto radial en el que formo parte ahora junto con Ian Scott que es el técnico, quien me dio los guiones para estudiarlos y lo ayudara con los personajes femeninos que ya los grabamos el viernes pasado, y el profesor me dijo que asistiera a la oficina los jueves y los viernes. Mis compañeros son bastante agradables y me dijeron que ayudaría en lo que fuese.

El miércoles me pego un poco el entrenamiento porque no me había puesto en serio realmente desde el lunes aunque pensaba que si. Richard me dijo que no podría asistirá a la pista el lunes porque estaba en Maracai, asi que fui a correr con mi madrea a la UCV por la tarde antes de clase: trote 20 minutos, calente e hice los ejercicios pertinentes y unas carreras cortas que al parecer no tuvieron mucho efecto porque el miércoles luego de dar las primeras cinco vueltas ya estaba cansada; afortunadamente luego fuimos a hacer unas cuantas pesas en la parte de arriba, y como estoy empezando no me pusieron mucho trabajo.

Ahora tengo muchas cosas mas que decir, porque esta entrada la comencé a escribir la semana pasada y no la pude terminar. Continuando con el jueves, fui ala oficina temprano por lo de las pasantías pero el profesor Rafael me dijo que me fuera porque debían grabar ese dia un evento con un ministro que realmente para mi no tenia importancia, por eso no recuerdo su nombre; el resto del dia fue sin contratiempos.

El viernes estuvo muy fuerte porque estuve activa todo el dia. El entrenamiento fue en la mañana temprano; era la primera vez que me correspondia ir a la universidad luego de haber entrenado en la mañana y encima llegue a hacer las pasantías. Estaba cansada cuando entre a la oficina y afortunadamente el profesor no estaba. En cabio estaba Ian, un muchacho llamado Ender que lo había conocido el diaanterior y otro que cursa las pasantías  II que me lo presentaron ese dia, su nombre es algo asi como Nestor o Ernesto (siempre tengo una confusión con ese nombre), bastante agradable y le gusta leer, por cierto ¡cual fue mi sorpresa cuando me comento sobre un libro de nada mas y nada menos que Stephen King! El titulo del libro es Blaze y quizá lo lea dentro de unos meses y les comento de que se trata. Almorcé allí mismo en la oficina, luego acompañe a Ian al estudio para grabar los personajes femeninos que ya me había estudiado, no fue difícil aunque me puse un poco nerviosa pero me escuche muy bien. Al anochecer de ese mismo dia llegue a mi casa con un poco de dolor de garganta que resulto ser gripe la cual me tuvo postrada todo el s´´abado con fiebre y malestar general. Otra de mis gratas sorpresas fue cuando en la noche a eso de las 6:00 mi madre se sienta a mi lado en la cama y me dice: ¿adivina quien me llamo? Al instante se me encogio el estomago. No pude encender el celular en todo el dia porque no tenia cargador, temia que fuese mi entrenador o el supervisor de la oficina que me notificaran algo importante. Mi primera suposición fue la correcta. ¿Qué te dijo Richard? Dije cuando mi madre confirmo mis sospechas. --¡me dijo que fueses a Barquisimeto con ellos! Vaya esa vez si me emocione masporque esa era una competencia que estábamos esperando,ya me había tomado la pastilla y me sentía mejor y pude darun pequeño salto en el mueble, aunque por alguna razón (quizá porque la conozco) supe que ella le dijo que no fuese porque estaba enferma, lo cual fue cierto. El domingo estuve lament´´andome por no haber ido, mis padres me decían que habría otras oportunidades pero no me conformaba con eso.

El lunes ya estaba resignada a comenzar la rutina de nuevo. Ya la fiebre remitia por fin y también los síntomas, aunque todavía tengo que escupir de vez en cuando. Esa tarde mama me dijo que había hablado de nuevo con Richard para que fuese a Barquisimeto; el le dijo que el sábado inscribió la lista de los osperajes grati y la comida, por lo  que teníamos que irmos ella y yo por nuestra cuenta pero a nosotras no nos importo y también que mi competencia de 100 metros planos era el miércoles, por lo que el martes mas tardar teníamos que estar alla. Salimos el martes al mediodía en carro de los que hay en el terminal, nos cobraron 800 bolivares a cada una. Llegamos a eso de las 4:30 de la  tarde e instalarnos en la habitación fue bastante comodo; mama pago y luego de eso, Richard nos djo que podía acomodarnos en la habitación de otra de las muchachas que entrena conmigo llamada Irene. Como mama ya había pagado esa noche, tuvo que dormir sola en la habitación pagada mientras yo me quede con Irene. Hable con ella en la habitación y vimos tele toda la tarde mientras arreglaba mis cosas. Mas tarde a la hora de cenar, Irene llamo a otros dos chicos que pertenecen también a nuestro grupo de atletas de Aragua (ese dia me entere que yo también estaba inscrita en esa delegación). Salimos a cenar los cinco: Irene, mi madre, los otros dos chicos llamados Edward y wilmer, y yo al restaurant de la planta baja del hotel: abajo nos alcanzo otro chico que también entrena conmigo llamado Carlos G, un mujeriego que no tiene mucha higiene que se sento a mi lado derecho. Recuerdo que Carlos no tenia dinero para pagar la cena en el hotel asi que debía dirigirse a la villa olímpica, el comedor donde asisten los atletas que desean comer gratis por asidecirlo, asi que Carlos G y Edward se fueron en el transporte de la villa y la cena fue solo de tres personas. Me gusto el club house que pedimos, aunque lo hubiese preferido con huevo. Regresamos al cuarto Irene y yo luego de una larga platica en el restaurant con Wilmer y mama. 

La mañana siguiente estuve muy muy nerviosa porque era la primera vez que iba a competir desde hace casi siete u ocho años; mi guía era Richard y por eso aumentaron mas mis nervios por lo experto que era, temia cometer una torpeza que nos hiciera fallar a ambos, de hecho eso fue lo que sucedió… pero vamos por partes. La mañana estuvo tranquila, desayunamos en el hotel porque el hospedaje lo  incluía. En el comedor conoci otros atletas y me encontré con Anthony Rocha, un chico que fue mi compañero de escuela. Al parecer por lo que me dijeron Richard e Irene luego de salir del comedor, Tony se había vuelto muy envidioso y hablaba mal de los demás. Salimos al estadio en un transporte, en ese tiempo me sentí extrañamente tranquila, pero era una tranquilidad superficial de esas que esperan el momento indicado para desvanecerse y dejar paso a la ansiedad. Comence a calantar con Richard y se me despejo un poco el sueño que tena, practicamos la salida que tenia años sin hacer. Me preocupada la sincronización del braceo y las piernas al avanzar, aun hoy al escribirlo en estas paginas suspiro y sonrio al pensar en lo que sentía en ese entonces. Cuando fue mi turno de correr, sentía que estaba distante de mi cuerpo, como si estuviese viendo las cosas desde utra parte: sabia que era yo quien se movia hacia la pista, pero sentía que las piernas avanzaban por inersia sin pensar, no se como describirlo. Calcé los zapatos para pista que llaman púas comprados por mi padre apenas el diaanterior, las cuales nunca me había puesto y menos entrenado con ellas. Aun con esa extraña sensación de inconciencia o distancia cerebro-cuerpo ¡no lo se! Sentia que Richard me daba palabras de aliento, me acomodaba el cabello y me daba en las piernas como luego me entere que hacen los atletas antes de cada competencia, apenas prestaba atención. Nos situamos en los tacos de salida, apenas entendia al juez que decía en sus marcas… listos… ¡disparo! Unos segundos de retraso fueron cruciales; trastabillé, casi me caigo y me quede los primeros cincuenta metros y aunque logre llegar, fui la última en hacerlo. Mi tristeza fue enorme y no cobre conciencia de mi cuerpo sino hasta que me quite los zapatos de pista y ya calzando los normales nos dirigimos a las gradas; apunto de llorar como una cría y avergonzada por haber perdido iba al lado de Richard pensando ¿Qué me paso? La gente le preguntaba como nos fue y me sentí aun peor si cabe, no quería que nadie me hablara por algún tiempo, sentía que todos habían confiado en mi (incluso yo) y me sentía muy mal por haber fallado. Ya en las gradas Richard me pregunto si aun seguía nerviosa, a lo que conteste que no estaba nerviosa sino que me sentía muy mal. Llegaron mi madre e Irene que estaban viendo la competencia: mi madre me dio el pañuelo paa sonarme la nariz y no solo me sirvió para eso sino para secarme las lágrimas también. No entendí por que había reaccionado como una niña pequeña, pero lo cierto es que me recrimine duramente por haber perdido de esa manera y pensé que lo iba a tomar mejor. Después de unos días, entendí que solo con un mes de entrenamiento no se podía aspirar a ganar, aunque no deseaba eso pero si un lugar respetable como segunda o tercera, entendí que no le había fallado a nadie y que era bastante para haber sido mi primera vez.

Hoy es domingo y ya estoy de vuelta en Caracas, escribiendo y recordando que de los fracasos se aprende y que no será la primera que pierda, ni la ultima competencia a la que asista. Les escribo enotra ocasión, los quiere, Zoraya.

򑠾la alegría es como una mariposa: si nos mantenemos en su busca, siempre se escapara de nosotros. Pero si nos mantenemos quietos, vendrá y se posara sobre nuestros hombros”.

Pd: disculpen, pero tengo un problema con los acentos, por eso no hay muchos en esta entrada, pero es por el computador, no porque no sepa donde se colocan.