miércoles, 3 de junio de 2015

Juan Salvador Gaviota

¡hola! Debo disculparme por la carga negativa que dejé en mi post anterior, es que al volver a recordar esa carrera se me fue todo al piso, pero nada ¡a seguir adelante! Esta semana nos la dieron para descansar en el entrenamiento pero no he parado, hoy y el lunes empecé los trabajos de pista y mae canso rápido todavía, tuve que dormir dos horas cuando llegué. Ayer estuvimos discutiendo el próximo libro en formación y wsu nombre es el título de esta entrada. Se trata de una gaviota que quiere aprender a volar y ese deseo de poder volar bien le ocupa todo su tiempo, incluso le quita las ganas de ser como cualquier gaviota corriente, de esas que viven para comer. Al principio, se deja convencer por su padre de ser una gaviota como las demás y lo intenta, pero el deseo de querer volar bien aún está en su interior, por lo que se vuelve solitario. Este libro insiste en la perseverancia y me recordó a la alegoría de Platón sobre las cavernas, al igual que en este Juan intenta enseñar a sus semejantes lo que ha aprendido para que vean que la vida no se trata solo de lanzarse sobre el primer pez que uno encuentre y por intentarlo Juan es desterrado de su bandada. Esta es la primera parte, ahora debo irme acostar porque mañana me toca un día un poco duro con las pasan tías y el entrenamiento con mi padre por la mañana. Los aprecio, Zoraya

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